Un agujero negro en lugar de corazón

por Invitado Sáb Nov 17, 2012 12:36 am

La razón por la que las personas no se relacionan conmigo es simple, es porque no tengo sensibilidad, en donde se supone que debería de tener un corazón tengo un agujero negro, no siento nada por las personas o al menos eso creen ellas, que complicado sería para ellas estar en mis zapatos, pero no es como si me importara mucho lo que las demás personas dicen de mi.

El joven mencionó esto con un tono tenue, tanto que parecía un susurro, no le gustaría que alguien le observara diciendo ese tipo de cosas, pues pensaba que las personas eran un estorbo, siempre lo pensó, la única persona que valía la pena para él era él mismo, no había cierto criterio que debieran cumplir las demás personas para hacerse sus ‘’amigos’’, para él la palabra amigo era tan solo una despreciable ornamentación que se le agrega a esa persona que solo sigues por un interés común, no significaba nada, un amigo era igual a un compañero de trabajo y decir amigo a una persona para él era como un tabú, una atrocidad o más bien una vulgaridad, pues el motivo de su repugnancia hacia esta palabra deriva de la hipocresía que hay aún en el mundo, la cual ha incrementado significativamente, así como las otras situaciones negativas que tomaban parte del mundo y este una vez más se hundía en una fosa oscura de la cual era muy difícil sacar, ¿Por qué diablos intentar sacarlo si podría hundirlo más? Al final quedará tan adentro que se dará por perdido y viéndose en esta necesidad los seres construirán otro mundo, no tan relativamente mejor pero posiblemente no tan hundido como el anterior, eso era lo que aquél chico pensaba, no había otra cosa en la cual pensar en una noche tan fría y serena como aquella, el viento daba esa impresión incomoda de que algo te está observando o bien que algo te acecha para al final terminar tomarte por sorpresa y quitarte la vida, una noche tan oscura que era complicado ver con claridad todo aquello que te rodea, pero que ciertamente una vez que te acostumbras a ella, puedes ver todo lo que los demás no, sin duda algo bastante interesante para el pensamiento de este hombre, unas palabras que para el justo posiblemente pertenezcan a una categoría muy asquerosa, pero en sí, él tenía razón en su forma de pensar, observaba ese cielo de invierno cubierto de estrellas a las cuales odiaba, emanaban luz y estaban tan allá, en la lejanía, en esa lejanía en la cual ningún ser humano podría en su vida tocar, a miles de años luz, tan distantes pero a la vez la emoción de que en algún momento alguna podría caer del cielo, no detestaba ese suceso, sin embargo, detestaba el brillo que irradiaban. Era todo un bosque tan enorme y callado, que le costaba creer que había encontrado un espacio pequeño sin ninguna especie de arboles que movieran sus ramas e hicieran ruido al frotarse estas, o bien se les cayeran las hojas como estrellas al universo, sin duda alguna lo más hermoso que había logrado ver en su vida, pero lo lamentable de esto es que él odiaba aquello que se consideraba normal y posiblemente odiara todo aquello que se considerara normal.

Que jodida mi vida, desearía que ocurriera algo más interesante, desearía romperle el hocico a tremendo cerdo que atreviera a llamarse dragón, desearía que algún bastardo en defensa de estas bestias sin oficio o beneficio se atreviera a darme al menos un golpe en la cara, pero lo que más desearía es que aquella mujer estuviese cerca de mi, tanto que me asfixiara, que pudiese ver con detalle sus ojos y que posiblemente pudiese asustar con facilidad, eso sin duda sería lo mejor que podría ocurrirme en este momento.

Sacó entonces una galleta de los bolsillos de su chaqueta, hay que tener en cuenta que es un ser humano y como tal siente frío o calor depende la estación o el clima, por ende llevar una prenda que le cubra del frío es algo vital pero sin exagerar, en ese entonces no llevaba en el cuerpo mas que aquél pantalón desgarrado de una rodilla y esa chaqueta acribillada que usaba en la mayoría de los casos, la cacería de dragones se vio en una escasez después de que el último dragón escapara de sus manos, desde entonces este tendría que haber estado trabajando en lugares miscelaneos y por ende, no tenía dinero suficiente para comprar ropa, al menos no hasta que volviera a encontrar un trabajo que pagara bien o los dragones apareciesen nuevamente en el mundo. Un hecho lamentable para quien fue el mejor mago, cazador de dragones y mercenario en la historia del reino, no le quedaba nada más que leer aquella carta que ella le dio hace mucho tiempo, él entrado en la desesperación la cerraba y abría nuevamente, intentando ver en ella a aquella chica que se había ido y que posiblemente nunca más volvería a ver y lo más doloroso de esto es que él la veía cada vez que parpadeaba o cerraba los ojos, ahí en donde es muy difícil sacarse las cosas, en su mente, la veía a cada momento, todo eso que los separó y que seguía siendo aún un obstáculo, la veía repitiendo una y otra vez ese momento en que se vieron por primera vez y donde le entregó su corazón.

¿Crees que esto es gracioso mujer? ¿Crees que enterrar mi corazón junto con los recuerdos que aún quedan es divertido? ¡¿Crees acaso que sea justo que después de todo, mi mente siempre se enfoque en ti y que siempre te escondas detrás de esos muros que representan mis temores?! No es sano hacerme recordar todo esto y menos que todo me recuerde a ti ¡¿Lo escuchas?!

Decía entre gritos y murmullos lo que realmente sentía y en lo que pensaba con insistencia, siempre dentro de su mente estaba el rostro de aquella chica que nunca estuvo con él, pero por como pensaba parecía que alguna vez fueron algo.

por **Cloud Nydalird** Vie Ene 04, 2013 5:45 pm

Las astillas del árbol caían por encima de Cloud, restallando en golpes rápidos y destrozando el tronco cortado que formaba aquél árbol. Ese mismo árbol era el lugar donde el joven entrenaba cuando tenía tiempo libre. Al ser sub-capitan de los caballeros de paradise no es que tuviera demasiada libertad para hacer lo que quisiera.

Un golpe, otro más... otro más, el pequeño tronco cortado seguía restallando, lleno de cortes por todos lados. El suelo estaba totalmente cubierto de astillas, y algunas de estas se habían quedado enredadas en el pelo del joven muchacho. Volvió a atacar una y otra vez, intentando crear el pequeño vació gravitacional en el golpe para estallar el tronco... pero era imposible, no podía controlarlo.

Finalmente se dio por vencido y se sentó en el suelo, quitándose las astillas con cuidado del pelo y enfundando la espada en aquella vaina tan extraña. Si se supone que la espada tenía algún poder, Cloud todavía no había conseguido desentrañarlo, le parecía algo imposible...

"Habría sido tan fácil si hubieras estado aquí" Los recuerdos de su padre iban y venían de su mente, como si se tratara de un yo-yo que sube y baja. Se miró la mano... los guantaletes que llevaba eran símbolo de su familia, un pequeño triangula coronaba la mitad de la mano en ambos. Se llevó las manos a la cara y suspiró, cansado. Ya llevaba allí varias horas y no había hecho progreso alguno... quizás la magia no fuera para él... pero ¿por qué entonces le habían bendecido con aquellos poderes?

Cloud se levantó del suelo y echó a andar, salto de un árbol a otro... si algo había controlado de poder saltarse las leyes de la gravedad era saltar desde largas distancias, eso si que lo controlaba a la perfección.

El bosque estaba oscureciendo poco a poco y tenía que averiguar la manera de salir de él, como fuera. Subió al árbol más alto y pegó un salto enorme, mirando por encima por donde podría salir del mismo.

-Al norte... genial...- Comenzó a correr en la dirección señalada, con una mano en la espada y la otra moviéndose al compás de sus pies. Las hojas se arremolinaban en torno a estos, creando círculos concéntricos de una manera un tanto extraña. La velocidad a la que corría el muchacho no era normal...

"Voces" se paró en seco y miró hacia un pequeño claro, rodeado de luz. El sol ya estaba próximo a desaparecer, pero ese pequeño claro estaba totalmente iluminado, como si se tratara de magia.

Cloud se acercó lentamente hasta él, donde se hallaba un muchacho... parecía ser un humano. Una vez a su lado permaneció recto y con la típica inexpresividad en su rostro. No es que le gustara demasiado tener que hablar con otras personas, pero iba a anochecer y no era muy seguro quedarse en un bosque de noche.

-Perdona... no queda mucho para que anochezca... deberías salir de aquí- Dijo tranquila y pausadamente, mirando al otro chico, con sus ojos del color de esquirlas de hielo. Esperó pacientemente su respuesta, quizás no pudiera salir solo de allí y si él podía ayudarle... lo haría.

por Invitado Vie Ene 04, 2013 8:19 pm

Natsumura, estaba profundizando lo que tenía en su mente y aunque su mirada estuviese ida, podía notar perfectamente la presencia del muchacho que estaba ubicado a unos cuantos metros de él, aún si este le daba la espalda al cuerpo del rubio le observaba perfectamente, se acercaba cada vez mas y esto incomodaba de alguna manera al mago, el cual podía sentir un aura sumamente impresionante, no entendía que era de forma concreta, a decir verdad ni siquiera sabía de su sexo o apariencia corporal, lo único que sentía era esa fuerza apretándole sin piedad, el vacío que tenía dentro de su cuerpo, aquél recipiente hueco que no guardaba dentro un alma estaba siendo presionado con algo que al parecer se llamaba ''alma'', una energía que no podía describirse a ciencia cierta, pero si se prestaba atención a la figura de este pseudo-objeto, resultaba fascinante el describirlo, pues este se veía como un manto de agua en los cuerpos, tomaba todo como si tuviese tentáculos, pero si se le observaba con precisión se vería algo asombroso, esto era una especie de esfera donde en su centro resguardaba un núcleo, un orbe de un color azul celeste, algo que en su vida había sentido de otro ser, pero sabía que aquél sujeto que se aproximaba no era el único en poseer eso.

El rubio abrió los ojos lentamente y se dio vuelta para observar con más claridad que era aquello, pero en su lugar solo pudo ver a un joven de un cabello dorado como el suyo, no era lo que deseaba ver a decir verdad esperaba encontrarse con algún ser de apariencia mucho más majestuosa, si bien esperaba ver a una deidad, una bestia o tal vez alguna diosa, pero no, era solo un chiquillo, pareciera que el fuerte sujeto aún no se había percatado de quien era Natsumura en realidad y porque no pensar en que tampoco le conocía, después de su expulsión de su reino fue a vagar a otros lugares donde por ser un forastero no era recibido de buena manera, eso con el tiempo se transformó en un factor definitivo que ayudó en su conversión, si no fuera por ello posiblemente estaría ahora pudriéndose en el infierno, ahora bien, el solía vivir en ese bosque a causa de su problema que tuvo con su reino, sin embargo seguía siendo un miembro sanguíneo de aquel lugar, mas no políticamente y lo que más le desagradaba de las monarquías en sí eran los reyes, pues si bien algunos son muy nobles, en este lugar esos eran mas que una farsa, ningún rey en el mundo era así, todos optaban en su totalidad por la dictadura, algunos mantenían su reino en paz, lo oscuro de esto es que vendían a la gente por objetos que brillaban, es por esto que la sociedad en los imperios estaba perdida y como siempre, los reyes se bañaban en oro.

Oye ¿Qué hace un enano como tú dándome ordenes en un lugar tan peligroso como este? El que debería salir de aquí cuanto antes eres tú, yo puedo cuidarme solo dentro de las tinieblas, es más, estas me defienden mas de lo que los guardias y nobles defienden a su rey, hace bastante tiempo me han protegido y ahora ahora no me han fallado ¿Sabes por qué razón los seres humanos se vuelven locos en lugares como estos? Es simple, porque las tinieblas los dominan y por tanto su cerebro y con ellos su cordura y lógica colapsan, pero si dominas perfectamente a las tinieblas, algo como el orbe que está en tu pecho aparece, pero en su lugar no es claro.

Aún si se refería al chico con ese tipo de cosas en voz alta sabía que no era una persona cualquiera, su fuerza era suficiente como para cortar a un dragón por la mitad sin siquiera hacer un esfuerzo, pero por lo que podía ver este ni siquiera sabía como hacer funcionar esa fuerza, esta se movía de manera descontrolada y si bien algunos flujos eran constantes la mayoría de la energía agarraba para el lugar que le daba su gana, una presa fácil había caído en sus manos.

por **Cloud Nydalird** Vie Ene 04, 2013 8:34 pm

Su forma de hablar impactó en el cuerpo del muchacho desde el primer momento, haciéndole recordar de alguna manera a los primeros "amigos" (Por decirlo de alguna manera) que había tenido, allí en las ruinas cercanas a su casa...

-¡Eres un monstruo, monstruo!- El niño estaba en el suelo, tirado. Varios niños habían rodeado a uno más pequeño que ellos, con ojos como esquirlas de hielo y delgaducho. El niño simplemente lloraba con los brazos por encima del torso, protegiéndose-. ¡Mira lo que le has hecho! ¡Ahora te vamos a dar tu merecido!- Un niño se había acercado antes al pequeño Cloud para hacerle una broma pesada, pero la magia que guardaba su cuerpo le había protegido y había mandando a volar al otro.

El que se suponía que era el jefe de la pequeña banda se acercó a Cloud. Era un niño regordete, con los papos inchados y pecas por toda la cara. Sus ojos eran pequeños, pero de un color verdaceo oscuro y su altura, para tener la edad que tenía, era increíble. Llevaba puesta una especie de medalla y unos pantalones oscuros, combinados con unas botas y un chaleco del mismo color. Se llamaba Flegoh, pero todos le llamaban "Machacador"

Una vez lo suficientemente cerca de Cloud, alzó el puño, y a continuación simplemente lo dejó bajar con una fuerza bastante grande para un niño tan joven como él.
El puño de "Machacador" no llegó a impactar en la cara de Cloud, pues un escudo de un color azulado saltó de golpe antes de que el golpe impactara, haciendo retroceder de sobre manera al chico regordete, el cuál cayó de culo llorando, con todos los dedos rotos.

El grupo de niños se separó rápidamente de Cloud y comenzaron a correr, asustados. Si ni siquiera "Machacador" podía hacerle nada, era mejor no acercarse a él... o por lo menos eso pensaban los niños. Cloud se quedó solo mientras todo se iba volviendo más oscuro... más oscuro...

Cloud volvió a la realidad y miró a Natsu, negando un par de veces con la cabeza, ido. Se había perdido en sus recuerdos una vez más y no había cosa que más odiara y que más le pasara.

Apoyó la mano en la espada y volvió la vista de nuevo a aquél hombre. Era normal que no le reconociera, le acababan de nombrar sub-capitan y además era bastante joven, solo 19 años. Pero su talento le había hecho ascender rápidamente, aunque él no quisiera que fuera así... era su deber.

-Perdón entonces si te he molestado... no pretendía daros ningún tipo de orden ni nada parecido, solo quería avisaros... lo siento- Cloud se inclinó de manera respetuosa, a modo de disculpa, luego simplemente se reincorporó y preguntó-. ¿A que te refieres con el orbe? No entiendo...

por Invitado Vie Ene 04, 2013 9:23 pm

Al parecer el chico era una nueva luz que resurgía de la nada, era repugnante para Natsumura, este en lo que se mostraba era lo opuesto que Natsu, el enano era un destello, mientras que el solía visualizarse como la oscuridad misma, es decir, la ausencia de luz, pero si algo había que mencionar era que ambos habían pasado por el mismo lugar en su infancia, por motivos desconocidos ambos habían tomado un rumbo diferente, la vida les había tratado igual al inicio, pero no les había guiado por el mismo camino en cierto momento, eso definió correctamente lo que sería cada uno de ellos, uno era alguien que defendía a los dragones y el otro era quien los cazaba, por tanto cabía la posibilidad de que ambos tuvieran cierta rivalidad, rivalidad que los dos desconocían, en su infancia, sus ojos ''benditos'' de color rojo perfecto otorgaron al humano una apariencia mucho más demoníaca, todos los chicos del reino le veían como un monstruo, llamándole constantemente de esta manera, este se enfurecía y golpeaba a los que le llamaban a si, con el tiempo nadie quería juntarse con él debido a que sabían y temían que este les volviera a romper los huesos, era un niño bastante complicado de tratar y por tanto no tenía amigos, nunca tuvo uno, siempre estaba bajo el cargo de su padre y este al ser consejero del rey le maltrataba de forma horrible si ocasionaba algún desastre, cuando este iba a ser nombrado como noble del rey, se negó completamente ocasionando uno de sus peores errores, un error que casi le cuesta la vida, odiaba y siempre odió que le dieran ordenes, debido a que nadie podía retenerlo se hizo una persona inquebrantable pero a la vez hundida en la soledad y la oscuridad y hasta la actualidad eso ha sido de él, antes cuando se relacionaba con los demás solo existía el horrible ''bakemono...'' y eso no solo era por parte de los niños del reino, sino de los guardias dentro del castillo, de su padre e incluso del rey mismo, hasta la actualidad no sabía de nadie que no lo conociera como lo que es, un monstruo.

Entiendo por que estás ido... mis ojos lo ven todo, estos ojos que se supone me harían especial acabaron con mi vida dentro de la luz, pero al menos, me permiten ver lo que hay dentro de la luz como tú.

Volvió a recordar lo que pasó en aquel entonces, cuando su padre mandó llamar a una organización para secuestrarle, una organización que efectivamente era del rey, la más fuerte de todas en el reino, el rey lo quería para experimentar, hordas de hombres llegaron hasta el lugar sin decir ni una sola palabras, lo único que recuerda es como uno a uno sacaron sus espadas y dagas, todas ellas con somnífero o veneno paralizante, estaba dispuestas a hacer lo que sea por la recompensa que otorgaba el rey, lo más repugnante y cruel fue el hecho de que su padre haya aceptado esto, no lo perdonaría, a nadie, un rey tiene que ser bondadoso y comprender los problemas que agobian a su reino, pero este no, era cruel y usaba a sus habitantes como muñecos, los movía el mismo, hacía que todos se movieran a donde él quería, no podía haber alguien mas fuerte que él, pero no es porque no lo había, sino porque debido al dinero que tenía, contrataba ''monstruos'' para que pelearan entre si, uno fallecía y el otro quedaba débil, a este último, el rey lo remataba y así acababa con su vida, la organización que le mandó su padre constaba de eso, de monstruos que actuaban como mercenarios a las cuales les pagaba el rey, ellos atacaron a Natsu, pero esquivándolos y contraatacando logró acabar con la mitad de los miembros de la organización, incluyendo al líder, todos estaban atemorizados y ante ello, él habló con liderazgo, diciendo que lograría guiarlos hasta la luz si tan solo ellos querían, pero todos rechazaron y uno entre ellos se autoproclamó nuevo líder y se alzó frente a Natsu, le escupió en la cara y le llamó ''Bakemono'' hecho que llevo a Natsu a matar a todos los presentes y esto mismo fue un factor que consumió el orbe del rubio, transformando a este en un agujero negro, después de recordar esto, volvió a donde se encontraba.

No estoy molesto, simplemente no me gusta que me den ordenes ¿Lo entiendes? y con orbes... me refiero a lo que yo no tengo... a un alma; gracias a esto, ya no me importa que me llamen monstruo

Le miró de forma fría y conforme se analizaba la mirada de este, se encontraba que en realidad no era frialdad la que había en su corazón, sino mas bien miedo, soledad y desprecio.

por **Cloud Nydalird** Vie Ene 04, 2013 9:44 pm

Los ojos fogosos del mago se clavaron en la frialdad de las esquirlas de hielo de Cloud, en una mirada que pareció ser eterna, en un análisis mutuo. Los minutos parecían horas y las horas parecían días, aunque se podría decir que no habían pasado más de treinta segundos hasta que el joven Cloud volvió a abrir la boca.

-¿Monstruo?- Enarcó ambas cejas, quizás fuera un dragón y por eso tuviera los ojos rojos... Cloud tenía el don de los apolos, pero no podía diferenciar bien la magnitud y la fuerza de los demás, nisiquiera la suya propia-. Eres... ¿Eres un dragón?- Cloud le miró con pasividad, apartando la mano de su espada, mirando sus ojos rojos. De todas maneras, no le parecía que por ser un dragón tuvieran que llamarle monstruo...

"Como a mí de pequeño" en su cabeza veía imágenes de como le habían hecho el vació todos aquellos niños... hasta sus padres... el único que siempre había estado con él era su propio padre, y ahora estaba muerto.

Todavía podía recordar la primera vez que había visto un dragón... un dragón blanco como la nieve, rondando los cielos. Ya le había impactado desde la primera vez que lo había visto, flotando en el aire como si se tratase de un pájaro, pero con escamas y con una dentadura brutal que podría masticar hasta la más inmensa piedra, daba igual lo dura que estuviera.

De aquél entonces solo era un crío, y todavía podía recordar como se había escondido para que no le detectara, aunque quizás lo hubiera hecho. Cabía destacar que aunque Cloud no lo supiera, el brillo de su alma era descomunal, debido a ser un apolo y a la magia que irradiaba su cuerpo. Por mucho que escondiera su físico, su alma era como un libro abierto para aquellos que pudieran verla... y los dragones podían verla.

"Quizás algún dragón podría enseñarme a controlar todas estas habilidades" esa era la esperanza que guardaba Cloud en su corazón, y al mirar de nuevo a Natsu se emocionó un poco, sin saber realmente lo que era.

Extrañamente, Cloud también podía notar la oscuridad que engullía toda luz en su alma, pero de una manera tan tenue que no le prestó demasiada importancia. Si había algún punto en el que Cloud fallara estrepitosamente era en detectar el aura de los demás, eso si que se le daba increíblemente mal.

por Invitado Vie Ene 04, 2013 10:24 pm

En cuanto escuchó la pregunta del joven se echó a reír, era mas que obvio lo que ocurría, era de los que habían reclutado hace poco en una organización que al parecer había decaído volvía a resurgir y había mandado llamar a personas poderosas como él con el único fin de proteger a los dragones, por lo que rápidamente se dio cuenta de lo que pasaba, sí era un enemigo, en parte no quería hacerlo pero tenía que, aún no comenzarían las hostilidades, pero si comenzaría el interrogatorio, que mal por parte del destino, justo tenía que juntarles de esa manera, un joven tan amable como él no merecía terminar de esta manera, el joven pensaba en darle otra oportunidad hasta que este pudiera aprender a controlar sus habilidades, no lo mataría con el único propósito de divertirse de la mejor manera cuando este obtuviera su maravillosa fuerza, en ese momento Natsumura quitaría la restricción a su magia y ofrecería una gran ofrenda a su árbol para que le otorgase un maravilloso fruto, uno que fuese codiciado por los demás magos como en aquél entonces.

Oye tú ¿Conoces lo que es el amor? La pregunta le brotó de la boca, ni siquiera era eso lo que iba a decir, no era parte de su interrogatorio, pero de alguna manera se le escapó ese cuestionamiento que mas que ser eso tendía a ser una pregunta sumamente extensa si se llegaba a explicar, ni siquiera sabía porque demonios había terminado diciendo eso, una persona que vive dentro de la oscuridad no debería conocer esos conceptos, terminarían devolviéndolo a la luz de nuevo y esto era lo que personas como él detestaban, entonces debido a lo que mencionó de forma errónea dijo sin dejar contestar al sujeto ¡Ignoralo, eso no te atrevas a contestarlo, si lo haces te romperé la boca! ¿Lo entiendes?

Dijo rápidamente para componer el asunto y como acto siguiente mencionó ahora lo que realmente quería exponer
No, no soy un dragón, yo los odio, me odio ha sido tanto que cuando veo uno no tengo más opción que matarlo, los mato porque así me hago mas fuerte y que mejor manera de hacerte mas fuerte que destrozando aquello a lo que odias, se quien eres chico, nadie posee un orbe tan fuerte ni de ese color mas que uno de los que cuidan a los dragones ¿o me equivoco? Ojala fuera así, te doy una opción... o peleas contra mi en este preciso momento o mueres ¿Cuál decides? Gesticuló una sonrisa que antes no se había visto en él, no lo mataría eso era evidente, quería divertirse solamente, quería que aquel hombre aprendiera a defenderse como el señor manda, pero no lo haría si se quedaba ahí machacando árboles, tenía que sentir la verdadera adrenalina de poner en peligro la vida y es por ello que le engañaría de esa manera, aunque si bien, la cuestión de ser enemigos no estaba lejos de la realidad.

Recordó a ese tipo molesto que siempre le esperaba afuera del castillo para enfrentarse con él, siempre le llamaba idiota y que por lo débil que era terminaba en el suelo suplicando lo soltara, este hombre normalmente le buscaba pelea debido a que quería impresionar a Sypha, pero ella solo se reía de él y de alguna manera, eso despertaba en Natsu una especie de celos, pues debido a que él se comportaba frío y pocas veces la hacía reír, sentía que en poco tiempo la chica se desharía de él y terminaría con otro hombre, quizá porque es la hija de un rey y normalmente ellas tienden a ser muy caprichudas, por tanto, siempre obtenían lo que querían, pero de alguna forma, Sypha siempre estuvo conforme con Natsu y le divertía verlo celoso de alguien, esto pasó hasta su muerte.

por **Cloud Nydalird** Vie Ene 04, 2013 10:37 pm

Cuando comenzó a hablar, el gesto de Cloud se torció. Había visto en sus ojos...lo había visto... o quizás solo fue su propia imaginación. Quizás ya no quedaba nada de bondad en aquél tipo. Cloud retrocedió rápidamente y llevó la mano a la empuñadura de su espada. No quería luchar contra él, pero debía hacerlo. La amenaza había sido más clara que el propio cielo azul, que sus propios ojos como esquirlas de hielo.

-En ningún momento pensé que... tuviera que ser así... si de todas maneras me vas a partir la boca...- El viento mecía el pelo del joven muchacho, que se movía de un lado para otro, en forma de pequeños pinchos. El ambiente se había quedado extrañamente parado, solo se escuchaba el mecer de las hojas y la claridad se iba apagando poco a poco a su alrededor... pero el claro seguía iluminado-. No conozco el amor... o por lo menos, eso creo.

Cloud desenvainó su espada, nervioso. Aquel tipo irradiaba una energía oscura, muy extraña, y ahora podía sentirla con más fuerza. Cloud clavó los pies en el suelo, seguía nervioso, realmente no quería hacerle daño a nadie, y a saber siquiera si podría hacerlo. Sus poderes no estaban desarrollados, pero no había llegado a donde había llegado por nada.

El ambiente seguía tenso, y Cloud recordó por un momento los entrenamientos con su padre, la adrenalina que se soltaba en el campo de batalla al comenzar un combate con otra persona... nada que ver con darle de espadazos a un simple tronco para desarrollar tus habilidades...

La espada de Cloud destellaba, era mágica, sí... pero ¿De que servía una espada mágica que todavía no había desarrollado el potencial que tenía escondido? ¿Y de que servía el pobre muchacho si no sabía como desarrollara? El combate empezaría en unos segundos... pero el momento antes del inicio se hizo inmenso. Cloud no tenía la intención de iniciar el combate, así que desenfundó su espada y se quedó preparado para cualquier cosa que pudiera llegar... tenso.

De golpe, la mirada del joven muchacho cambió y la luz que irradiaba comenzó a crecer de una manera extraña. Cloud no lo sentía como tal, simplemente su "don" se despertó, y la mirada se quedó clavada en Natsu. Las frías esquirlas de hielo que eran sus ojos comenzaron a desplegar un pequeño brillo en su interior, como si el iris estuviera dando vueltas en pequeñas esmeraldas azules... pero el pequeño punto negro, la pupila, estaba totalmente clavado en aquel mago.

por **Zadock Allen** Vie Ene 04, 2013 11:25 pm

-Una noche tan oscura como la mente de ese dragón que se hacia llamar el Campeón de Nastrand,una mente perturbada la cual hallaba su paz entre la sangre de sus victimas.
Pero la culpa no era ni por asomo suya,esta venia desde hace mucho tiempo prácticamente 6 años después de que fuera encontrado y acogido por una familia de mercenarios,el haber tenido que defenderse de su "Padre" de tal manera y en aquella situación no le dejaba otra escapatoria a su mente mas que la locura pero esta no era muy vista.
Ella se despertaba en el fragor de la batalla y confundía tanto los sentidos de Zadock que podría llegar a perder un brazo y medio pelotón de sus aliados sin darse cuenta.Esa noche el estaba descansando tras un largo paseo en el bosque,en un principio solo le molestaron unas voces pero al escuchar a lo lejos una conversación en la cual apenas distinguió las palabras amor y dragones no pudo contener su curiosidad y sin cortarse un pelo se levanto y no paro de andar hasta estar observando a esas dos personas conversar de frente pero el no soltó ninguna palabra en ningún momento solo se limito a escuchar tapado bajo su capa roja la cual le servia de abrigo ya que bajo el solo había unas vestimentas negras y descansando sobre su espalda su gran espada.Sus ojos iban mirando a cada uno de ellos cada vez que hablaban y no solo hasta que uno de ellos desenvaino su arma no paro su fría y melancólica mirada sobre el arma de este pequeño guerrero.-

por Invitado Vie Ene 04, 2013 11:56 pm

Prepárate enano... No quería hacerlo, me habías caído bastante bien, pero dadas las circunstancias creo que será mejor que apartir de este momento ambos sigamos como enemigos, enserio lo siento Apolo. Observó que este desenvainó su espada por tanto quería decir que estaba listo para comenzar a pelear, no se esperaba que él iniciara la pelea, Natsu tenía que hacerlo, justo como lo creyó el chico no peleaba muy a menudo, pero antes, sus ojos se percataron de un sujeto que estaba muy cerca de ellos, tanto que posiblemente escuchó su conversación, la visión del cazador le permitía ver personas que estaban escondidas, que mejor forma de hacerlo notar que llamando a ese tipo, también tenía un orbe fuerte que desprendía un aura de color rojizo, sin embargo, no era tan fuerte como su amigo, quizá estaba debajo de unos niveles mas que él, aún así por lo que podía notar de él, es que tenía alma y por tanto seguramente era bueno, si estuvo escuchando toda la conversación seguramente defendería al apolo y eso no serviría de mucho para su plan, así que debía entender que era ese hombre, una vez esto, podría atacar como se debe, pero por el momento no deseaba atacar al rubio, pensó rápidamente en que si atacaba al otro sujeto este mostraría sus habilidades y por tanto podría determinar que es lo que era.

Oye tú...No deberías de espiar a las personas de esa manera, debido a esto, he de pensar que tu deber aquí es el de pelear y por eso tomaré tu acto como un intento hostil, así que tu también prepárate, no se si me conoces, pero si es así entonces tendrás ventaja contra mi. Apolo no puedo comenzar una pelea contra ti sin antes conocer tu nombre ¿Cuál es? Bueno, pon atención y me dices en el transcurso

De un momento a otro el sujeto se distorsionó y justo apareció detrás del sujeto al que mencionó atacaría primero, después intentó asestarle un puñetazo debido a que posiblemente este estuviese distraído y el factor sorpresa de la aparición, así mismo intentó asestar una patada en la cabeza del enemigo, primero dio un salto levantando el pie y dejó que este cayera por efecto mismo en la cara del enemigo, eso sin antes imprimir fuerza propia en el movimiento.

Eso le hizo recordar cuando defendió a un compañero en una guerra que provocó el rey de Synchronicity, no tenían armas y su compañero estaba herido, pero aún así él dio una muy buena pelea contra los enemigos, en ese entonces ni siquiera conocía la magia como tal, solamente peleaba cuerpo a cuerpo o implementando una serie de estrategias, el se divertía bastante en esos tiempos y a pesar de hoy parecer una persona que ha sido consumida por la oscuridad no era así, él tenía su lado bueno, lo malo es que ya no lo mostraba con tanta frecuencia como antes.

por **Cloud Nydalird** Sáb Ene 05, 2013 12:15 am

Cloud vio a aquel enorme hombre y entrecerró los ojos, visualizando o intentando percatarse de su nivel de magia... como Cloud no era demasiado bueno en aquel aspecto no pudo discernir su alma con claridad, pero lo que estaba claro es que...

-Es un dragón- Dijo casi en un susurró. Al haber visto a aquél tipo una fuerte presión embargó la cabeza del muchacho, que sintió algún extraño poder en aquel tipo... no sabía explicar como, pero el joven de ojos azules sabía que aquél hombre era un dragón. Era la primera vez que Cloud sentía algo como esto... cuando era pequeño su don todavía no estaba demasiado desarrollado, y al ver a aquél dragón cuando era solo un niño no había sentido esa fuerte presión.

De golpe, el mago contra el que se iba a enfrentar salió disparado contra el otro hombre, el dragón. Cloud se quedó patidifuso por la velocidad de teletransportación, y por un momento no pudo ver bien todo... pero su don volvió a despertarse, quizás no demasiado, pero si lo suficiente como para poder leer los movimientos de aquél hombre.

A una velocidad increíble, Cloud se lanzó contra el mago y justo antes de que la patada cayera en la cara de aquel hombre, la espada se interpuso entre los dos objetos a impactar. La espada estaba de canto, por lo cual no hubo ningún tipo de corte en la pierna del mago, simplemente un "Clank" por la fuerza del impacto.

Una nube de polvo perseguía los pies del joven, que lanzó un tajo hacia el pecho del mago que aún seguía en el aire. La espada se volteó y el tajo que había lanzado el joven Cloud fue con la parte plana de la espada, para no cortar ni dañar demasiado al sujeto en casa de que le diera, soltando toda la fuerza que había hecho con los brazos y girando la cadera en el golpe para tener más movilidad.

por **Zadock Allen** Sáb Ene 05, 2013 12:25 am

-Zadock al ver que los dos se percataron de el y se lanzaron tanto a atacarle como a defenderme se mantuvo neutral ante la ayuda de ese segundo Humano el cual ya sabia que era un Dragón por lo que no vio necesario el esconder su naturaleza.Su capa se destrozo por completo y parte de la camiseta de su espalda también para dejar paso a unas grandes alas de color rojo y parte de armadura las cuales azotaron a esos dos para quitárselos de encima,levanto una gran ráfaga de viento y movió su espada la cual no tardo en desenvainar para que no le molestara si tenia que volar.

Las alas se plegaron después de lanzar un golpe de aire hacia esos dos y solo por seguridad el salto hacia atrás y se puso frente al que le ataco previamente.-

¿Por que intentas golpearme?Solo escuche algo y me dedique a observar,que hombre tan hostil

-Tras decir eso mantuvo su posición de batalla con la cual solo sostenía su gran espada la cual era igual de grande que uno de ellos con una sola mano y la otra se mantuvo en posición defensiva por si necesitaba ayudarse de esta en cualquier posible ataque.-

por Invitado Sáb Ene 05, 2013 1:22 am

Natsumura se creyó estaba a punto de asestar aquella patada cuando el chico rubio interpuso su espada bloqueando así el movimiento de este, lo único que pensó en ese momento fue que estaban haciendo una alianza, pero estaba acostumbrado a lidiar las batallas desventajosas en cuanto a cantidad, siempre llegaba cualquier tipo a quererse pasar de listo a agarrar a uno solo con su pandilla, siempre ocurría así, en especial si se trataba de organizaciones, esas donde eran bastantes, quizá llegaban hordas de 50 personas como mínimo a querer asestarle algún golpe incluso a matarlo y se llevaban una linda sorpresa, ellos no sabían que llevar una espada al momento de luchar contra Natsu es un beneficio para él, pero es evidente que él les mostraría el porque, si la espada era mas grande, el beneficio sería mayor y eso fue lo que observó en el dragón, dos espadas enormes y pesadas, el viento corría de forma agobiante, podía sentirse un poco el sosiego acumulado en el suelo y la brisa en el cielo era esplendida para pelear, justo al medio el pelo de Natsu se movía, iba contra el viento y eso era perfecto, estaba en una situación que esperaba con ansias, ese movimiento de las hojarascas era esplendido, nunca en su vida había sentido tanta emoción al observar un escenario tan...¿épico? si, era bastante épico, lo mejor de esto es que ni siquiera había tenido que salir a buscar un dragón, este llegó solo para ser capturado por el hombre de cabello dorado, no tenía intenciones de lanzarse contra el otro rubio, pero era evidente que si esto seguía así terminaría siendo un estorbo mucho más grande del que creyó que sería, aún no era momento para agredirlo, el dragón se lo merecía más por entrometerse en algo que no debía.

Se lanzó nuevamente entrando con la velocidad y cuando estaba cerca de este empleó dos barreras para asestar un golpe más fuerte justo a la cara del enemigo. Nunca me había divertido de esta manera desde mi primera batalla contra un dragón, es bastante divertido, ¡MAS DIVERSIÓN!. No se le entendía muy bien lo que decía pues este tenía las mejillas infladas y no abría la boca, como si se tratase de un juego de niños, normalmente le gustaba pelear con las mejillas infladas, le daba ese toque de inmadurez que los enemigos subestimaban siempre, incluso en guerras siempre hacía eso.
Debido a que vestía una manta negra, una cota de cadenas, una camisa blanca, pantalones negros y zapatos del mismo color es que pudo resbalar por el bolsillo del pantalón una de sus adoradas galletas de nuez, por lo que se entiende que lo que tenía dentro de la boca era esto.

por **Cloud Nydalird** Sáb Ene 05, 2013 1:34 am

El joven Cloud no se esperaba el aleteo creado por el dragón y este salió volando bastante más lejos de lo que pensaba. Su poder de ingravitacionalidad le jugó una mala pasada de nuevo, saliendo esté volando más de lo que debería, perdiéndose en la frondosidad del bosque. La suerte de la ingravitacionalidad que acababa de usar sin darse cuenta es que, al chocar contra el árbol, fue tan lentamente que casi ni se hizo daño.

Una vez se rascó la cabeza y hubo gruñido un poco por el estúpido uso de aquél poder, frunció ligeramente el ceño, mirando de nuevo al claro, donde estaban luchando aquellos dos. Desde tan lejos no podía ver bien lo que estaba pasando, así que empuñó su espada fuertemente y corrió hacia allí.

La batalla ya estaba en su máximo esplendor, y Cloud fue lo más rápido que pudo. Extrañamente la presencia del dragón desconcentraba a Cloud de sobre manera y sus poderes parecían haberse vuelto chiflados, actuando cuando menos lo esperaba.

-Mierda...- con aquel descontrol era imposible luchar contra nadie, pero debía hacerlo, tenía que impedir al cazador capturar a su enorme presa. Justo cuando ya estaba llegando volvió a sentir el fulgor del alma del dragón. Se secó el sudor con el dorso de la mano y empuñó de nuevo su espada, fuertemente.

Su alma volvió a brillar, algo descontrolada por el combate. Cloud se lanzó contra el mago, intentando atacar por un costado y nada más impactar (contra lo que quiera que hubiera impactado) giró sobre si mismo para atacar por el otro, rápidamente, en una sucesión de golpes que brillaban al chocar contra lo impactado. Quizás la espada no hubiera sacado aún su poder, pero los brillos que hacia al entrechocar eran mágicos.

por **Zadock Allen** Sáb Ene 05, 2013 6:29 am

-La espada del dragón paro el golpe del enemigo el cual dio contra esta ya que era bastante grande,lo suficiente para ser usada como escudo y aprovechando el momento hizo un combo el cual era bloquear y luego lanzar un corte hacia el costado del enemigo intentando así poder cortarlo por la mitad.-

No ataques de forma tan inmadura al campeón de Nastrand

-Tras decir eso volvió a abrir sus alas y estas se batieron dejando así una gran polvareda en el aire antes de volar hacia arriba para observar que el humano estaba intentando ayudarle.El no iba a despreciar su ayuda pero tampoco le iba a recompensar por ello.-

por Invitado Sáb Ene 05, 2013 3:39 pm

En sí, todo estaba saliendo de acuerdo a su plan, ni siquiera se pudo acordar de cuando pensó semejante estrategia, ahora que sabía que ese hombre era un dragón no tenía más que cazarlo y aunque no podía decir mucho de si lo haría o no, había estado lidiando con ellos desde ya hace bastante tiempo, conocía todos aquellos movimientos que podrían usar tanto para atacar como para esquivar, bendito cerebro, ni siquiera en este momento le había fallado para nada, el chico tenía ganas de comer una galleta pero no, lo que tenía en la boca no era una galleta, era simplemente una trampa, el chico se lanzó contra el dragón con el único objetivo de que este bloqueara su ataque y así mismo centrara su fuerza en un solo golpe, es decir, que lo tenía comiendo de donde se debe, usaría nuevamente el factor sorpresa y esta vez nada podría evitar que el golpe asestara, lo único que podía hacer es recibirlo de lleno, quedaba poco para que explotara una Timer BIM que contenía dentro de su boca, fue así como terminó escupiendo esta directo a la cara del dragón. Para eso antes he de explicar el plan del rubio, el cual se basó en atacar al dragón, mientras se movía rápidamente aprovechó para llevarse una Timer BIM activa a la boca, en ese transcurso que la bomba estaba activa dejó correr el tiempo administrándolo correctamente, la galleta era solo una distracción para que todos los presentes creyeran que estaba comiendo una, pero no era así, dentro de su boca tenía una bomba, su primer movimiento sería lanzarse contra él, como previno antes el joven Apolo se le lanzaría al Mahoutsukai intentando asestarle un golpe, pero en ese tiempo el mago lo bloquearía con las barreras de sus manos, con la derecha el del dragón y con la izquierda el del apolo, con esto ambos estaban en el rango de la explosión, justo un momento antes de que la bomba explotara Natsumura utilizó la teleportación a una distancia precisamente larga del enemigo con la cual traspasaría el cuerpo del gran sujeto y se mantendría dando su espalda al mencionado hombre, pero antes aprovechando que este tenía impresa su fuerza en la espada con la que golpearía, su ojo notó la carencia de fuerza en la espada izquierda y tomó sin que los dos se diera cuenta de momento la espada con la que bloqueó, ya estando a cinco metros lejos de ambos, la explosión se llevó a cabo dañando al apolo y al dragón sin dañar al mago y una vez la espada en sus manos procedió a hacer la ofrenda como se debe.

Deidad que proteges la lógica de este mundo, tú que defiendes todo el razonamiento humano, tú que deseas las creaciones de estos seres, tú que alabas todos los inventos... te propongo que aceptes esta ofrenda con el fin de que me otorgues lo que deseo, que me dejes seguir avanzando y haciendo uso de vuestro poder de la forma en que se debe hacer, necesito que me des más tiempo, ¡Acepta ahora esta ofrenda!

Una vez terminada la ofrenda la espada desapareció y en la mano derecha del rubio aparecieron diez anillos más, los cuales completaron los espacios de los que había perdido y así mismo rellenaron otros espacios que aún no habían ocupado, quizá con esto, ya no se preocuparía por gastar los anillos de manera tonta.

por **Jack Napier Weisman** Mar Ene 08, 2013 9:45 pm

Moderación

Natsumura Yamamoto : Primero que nada , al principio dices que es tu primera batalla con un dragón y luego das a entender que con la experticia conoces sus movimientos basta de contradicciones , por lo demás el si especifico que volaba por lo cual piensa que por el tamaño de sus alas fácilmente abra alcanzado unos 20 o mas metros es un dragón y su tamaño y escamas aran a tu bomba poco efectiva adema s tu bomba explota en 10 a 12 segundos antes de que la bomba alcance esa altura ya abra explotado por lo que apenas y lo alcanzo la onda expansiva .

Zadock Allen: Continua con el post desde que sentiste una fuerte briza por la onda expansiva de la bomba , te pido que a la próxima en vez de hacer spam con corchetes me informes via mp para solucionar el problema y si quieres me mandas el link de tu avatar y yo lo pongo de manera que se vea de un tamaño adecuado

Una vez se lea esta moderación me mandan un mp para proceder a borrar los post que están demás en el tema me refiero a los con corchetes

por **Zadock Allen** Miér Ene 09, 2013 2:01 pm

-Parecía que su intuición no fallo en absoluto ya que le salvo de una explosión bastante fuerte que incluso llego a crear una ráfaga de viento que pudo notarse aun estando a una altura considerable,su rostro no había cambiado en absoluto siempre mostrando una mirada desinteresada.-

Parece que vas a molestar mas de lo que pensaba,ni siquiera venia con intenciones hostiles.

-En su voz se podía notar algo de decepción ya que no iba a poder atacar cuerpo a cuerpo mientras esas bombas siguieran amenazándole,por lo menos en su cuerpo de humano.No llegaba a ver bien por la humareda que se había formado pero por si volvía a la carga en su espalda también creció una cola en proporción a sus alas y cuerpo la cual era mas larga incluso que su espada,estaba protegida con escamas y partes de armadura que mediante "tornillos y tuercas" estaban pegadas a la cola.-